Un gol de cabeza de Yeray en los instantes finales del partido permitió al Athletic Club consolidarse en la cuarta posición de LaLiga, dejando a Betis y Villarreal a ocho puntos, aunque los amarillos cuentan con un partido pendiente. Por su parte, el Sevilla ve comprometidas sus aspiraciones europeas y llega con dudas al próximo derbi contra el Betis tras el parón internacional.
La primera mitad estuvo marcada por la escasa profundidad ofensiva del Sevilla, un equipo camaleónico bajo García Pimienta, que mostró pocas ideas claras ante un Athletic tranquilo y con hasta ocho cambios respecto al once que venció a la Roma. El conjunto bilbaíno apenas necesitó algunos destellos para generar peligro: un disparo de Berenguer se estrelló en el larguero y Nyland detuvo un penalti a Vesga tras revisión del VAR.
En la segunda mitad, Lukebakio avisó con un par de intentos que pusieron a prueba a Unai Simón. Pimienta reservó a Saúl para evitar una posible segunda amonestación y Lokonga aportó velocidad al juego sevillista. Nyland mantuvo vivo al Sevilla con paradas decisivas ante Ejuke y Carmona, evitando que los locales abrieran el marcador.
Sin embargo, el Athletic reaccionó con cambios de Valverde: Nico Williams, Galarreta y Jaureguizar dieron frescura y profundidad al ataque. Finalmente, un cabezazo inapelable de Yeray sentenció el encuentro y dejó al Athletic con tres puntos cruciales, mientras que el Sevilla se queda con un sabor amargo y preocupaciones de cara al derbi.



