Durante las recientes negociaciones para extender sus contratos, tanto Dani Olmo, originario de Cataluña, como Bernardo Silva, de Portugal, tomaron precauciones al incluir cláusulas de rescisión en sus acuerdos que no fueran excesivamente elevadas. En ambos casos, los jugadores dejaron una puerta abierta al FC Barcelona.
A finales de agosto pasado, Bernardo Silva renovó su contrato con el Manchester City hasta 2026, pero con una cláusula de rescisión moderada, alrededor de 50 millones de libras (unos 58 millones de euros). Este movimiento sugiere su interés en un posible futuro traspaso al FC Barcelona, quienes evaluaron su fichaje el verano pasado pero no pudieron afrontar el costo en ese momento.
Dani Olmo también adoptó una decisión similar al ampliar su contrato con el RB Leipzig hasta 2027, incluyendo una cláusula de rescisión de 60 millones de euros, inferior a las expectativas de su club. Aunque siempre ha manifestado su deseo de regresar al Barcelona, otros equipos como el Real Madrid, el Atlético de Madrid o el Manchester City podrían intentar ficharlo.
LLDLT | Manuel Meza