Con la llegada y presentación de Kylian Mbappé al Real Madrid, Carlo Ancelotti tiene un ‘bendito problema’ en su parcela ofensiva. No solo se suma el ‘9’ francés, sino también Endrick, la joya emergente proveniente de Palmeiras que no tardará en presionar por un puesto. Asimismo, los Vinicius, Rodrygo y Brahim siguen en la nómina, como Jude Bellingham, que probablemente tendrá que retrasar su zona de influencias, y Arda Güler, cuyo protagonismo en la Euro le da puntos para ganar relevancia.
Mbappé y Vinicius…¿fijos y compatibles?
En principio, las grandes estrellas de la delantera son Vinicius Jr. y Kylian Mbappé. Los ‘fijos’. El ariete francés llega para ser figura por todo lo que significa (¿el mejor futbolista del planeta?), mientras que Vini viene de ser jerarca del club en el último cuarto de cancha: anotó 24 goles y registró 11 asistencias la campaña pasada, incluyendo su diana en la final de Champions League.
Aun así, una incógnita común es sobre la compatibilidad de estos dos; aunque el brasileño viene de un año de transformación (pisando carriles centrales y zonas interiores sin depender de la línea de cal), no es ningún secreto que el hábitat natural de ambos es arrancando desde izquierda. Sin embargo, si alguien es capaz de encajar a ambos en un fútbol líquido y lleno de libertad, ese es Carlo Ancelotti.
Jude Bellingham, también fijo, de distinta forma
El otro que apunta a ser fijo sin ninguna duda es Jude Bellingham. No obstante, alterando su rango de acción. Con la demanda excesiva de futbolistas en el último tercio, el inglés, hipotéticamente, se encontraría con una vieja amiga: el centro del campo. El ‘5’ de Zidane en la espalda engaña y sus 36 aportaciones de gol directas engañan, pues Jude ha sido un mediapunta desde que aterrizó en Madrid. La punta del rombo con Vini y Rodrygo bien abiertos en las noches de gala. Brillando en el área, mucho más que en la gestación.
Por lo tanto, con la salida de Kroos encima y su estatus de intocable, Bellingham debería tomar más responsabilidades desde lo técnico. Llegando, en lugar de estando. Haciéndole honor al ‘5’ en la espalda. Y cerca de Fede Valverde, que también ha dado un salto cualitativo filtrando y lanzando.
Rodrygo, ¿en la cuerda floja tras la llegada de Mbappé?
Si bien el año pasado como completo titular lo incluye en la ecuación actual, Rodrygo Goes parece estar en la cuerda floja. Arrancando por derecha y cayendo por dentro para hacer el campo corto o atacar el lado débil ha sido su rol, y muy positivo, pero las piezas presionan. El brasileño, además, acaba de firmar una Copa América insuficiente. Tácticamente hablando es un gran futbolista, y su talento es superior, aun así, la competencia es una locura.
Por añadidura, Rodrygo ha sido, entre los ‘intocables’, el único con muchos rumores de posibles salidas alrededor de él. Entre el orden de prioridades, con las llegadas y los márgenes de mejora que tienen los Endrick o Güler, es posible que Goes no esté como primordial. Aunque, por supuesto, eso lo decidirá el día a día, donde puede reafirmar su nivel en cualquier puesto de los de arriba, ya que su versatilidad le permite saltar al campo ante todas las ausencias.
Endrick, presente
La joven promesa proveniente del Palmeiras pasa desapercibida en las charlas populares, pero está más presente en el corto plazo de lo que se puede llegar a creer. El talento de Endrick es descomunal, por eso el Madrid apuesta tanto (y tan rápido) por un chico que apenas cumplirá 18 años. Selección de Brasil, Copa Libertadores y Brasileirao en su corta trayectoria. Un tren inferior nunca antes visto, una formación inmejorable en las inferiores de Palmeiras y la camiseta por dentro. La conformación de una bestia competitiva.
Endrick buscará su puesto y responderá en cada oportunidad, lo que pone la disputa todavía más compleja para Ancelotti, que se lo pasará de lujo con un futbolista como éste a su disposición.
Güler y Brahim, ¿rezagados?
Arda Güler acaba de ser una revelación de la Euro 2024 como director de orquesta en Turquía cada minuto disputado. Debería ser innegociable que se mantenga siendo propiedad del club, pero el nivel de Güler es para ser crucial en cualquier horizonte de Europa, pero el ‘overbooking‘ hace difícil que tenga continuidad con el Madrid.
Sin embargo, Brahim Díaz pierde sus fichas progresivamente. Paradójicamente, detrás de Mbappé, sería el mayor de la delantera. Con 24 años, sí, pero su techo no es tan agresivo como los demás, al parecer. Es un futbolista que brinda facilidades en contextos de atasco, y ha respondido con certeza en su rol de revulsivo o tomando minutos residuales. Con la puerta de salida también abierta y la posibilidad de hacer caja, puede ser el sacrificado.
LLDLT | Alexis Guanchez